GameStop está cerrando silenciosamente numerosas tiendas estadounidenses, dejando a los clientes y empleados tambaleándose de los cierres inesperados. El declive del minorista es claramente evidente en la reducción de casi un tercio de su presencia física. Las plataformas de redes sociales están llenas de informes de clientes y empleados afectados, pintando una imagen preocupante del futuro de la compañía.
Una vez que el minorista físico más grande del mundo de videojuegos nuevos y usados, GameStop cuenta con una historia de 44 años, que se origina como la de Babbage en 1980. Aumentado por la inversión de Ross Perot, alcanzó su punto máximo en 2015 con más de 6,000 ubicaciones globales y $ 9 mil millones en venta anual. Sin embargo, el cambio a las ventas de juegos digitales en los últimos nueve años ha afectado significativamente su rendimiento. Para febrero de 2024, los datos de Scrapehero revelaron una disminución de casi el 33% en las tiendas físicas, dejando aproximadamente 3.000 ubicaciones en los EE. UU.
Después de una presentación de la SEC de diciembre de 2024 insinuando más cierres de tiendas, una ola de informes inundó plataformas de redes sociales como Twitter y Reddit. Los clientes expresaron su decepción, citando la pérdida de opciones de juego convenientes y asequibles. Los empleados también expresaron preocupaciones, con un empleado canadiense que destaca los objetivos de ventas poco realistas en medio de los cierres de la tienda.
La tendencia continua de cierre
Los cierres recientes continúan una tendencia a la baja para Gamestop. Un informe de Reuters de marzo de 2024 predijo una perspectiva sombría, señalando el cierre de 287 tiendas en el año anterior, luego de una caída de ingresos de casi el 20% (aproximadamente $ 432 millones) en el cuarto trimestre de 2023 en comparación con 2022.
Se han hecho numerosos intentos para revitalizar Gamestop, incluida la diversificación de juguetes, ropa, comercios telefónicos y clasificación de tarjetas comerciales. Un impulso significativo llegó en 2021 de un aumento en el interés de los inversores aficionados, documentado en el documental de Netflix "Eat the Rich: The Gamestop Saga" y la película "Dumb Money". Sin embargo, estos esfuerzos no han sido suficientes para detener la marea de los cierres de las tiendas y las luchas continuas de la compañía.